Uniformados hasta el cuello en azul con detalles amarillos y botones dorados el gremio de los Séptimo de Caballería han sido los más llamativos por ser su disfraz el más complejo.
No quiere decir que el resto de gremios hayan quedado infravalorados porque con sus perneras de cuero y su lazo a la espalda los vaqueros han hecho todo lo posible para sentir que allí estaban.
Tampoco queremos olvidarnos de los granjeros enfundados en su peto vaquero con su sombrero de paja que no han sido menos que ninguno.
Y por último, con sus tirantes y sombrero negro como el carbón, los mineros han demostrado que no sólo es oro lo que reluce pues han sabido llamar la atención con todas las ganas que han echado al asunto.
Mañana será otro día pero continuaremos con la gran fiesta del pueblo en la que seguro no faltarán los buenos momentos.
1 comentario:
Madre mía que bigotes más maravillosos! estáis todos deliziosos!
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